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Y tu?, Que vas a hacer?


Estamos iniciando el 2016 y como de costumbre la mayoría de las personas lo abrazan con muchas metas y ambiciones trazadas, con la esperanza de mejorar su calidad de vida, con muchos bríos y con la firme determinación de que nada los detendrá.


Se puede decir que, esta determinación, se mantendrá por los primeros cuatro meses y que la gran mayoría de las personas a partir del cuarto mes empiezan a abandonar el barco. Cuando le preguntamos a esas personas que los motivó a, por lo menos en este momento, desistir de perseguir sus sueños, siendo la respuesta más común, su impotencia de no poder alcanzarlos.


Lo que podemos observar desde afuera, la marcada orientación de desplazamiento de carga de nuestras responsabilidades a factores o personas diferentes a nuestra responsabilidad, culpando al vecino, al gobierno, a la empresa, y un largo etcétera.


A nivel profesional, nos quejamos de que en la empresa en que laboramos no nos apoya, no da capacitación, no tiene crecimiento, el jefe es malo y un sinnumero más de quejas, de cosas que nos "imposibilitan" alcanzar nuestros sueños.


La cruel realidad es que la mayoría de nosotros queremos las bondades del éxito sin la el dolor del sacrificio, queremos mejores salarios, pero no queremos aumentar la entrega de valor a nuestras empresas, queremos que nuestros planes de trabajo se cumplan a expensas del no cumplimiento de los planes de trabajo de las áreas relacionadas y así una larga lista de deseos sobre la base de facilismo, los cuales no sustentan el cumplimiento de lo deseado.


Cada vez que converso con alguna persona que se está quejando de la empresa en que se encuentra laborando, le pregunto, Y tu?, Que vas a hacer?, porque al final, el resultado de nuestra caminar por la vida es solo de nosotros, no podemos desplazar esa responsabilidad a un tercero, porque ya ese tercero tiene su responsabilidad y es lógico que tiene prioridad antes que el tuyo.


Si no estas conforme con la empresa en que laboras, revisa con tus superiores cuál es tu situación, pero no lo enfoques desde el punto de vista de que cuando te van a aumentar, sino, desde el punto de vista saber si esa empresa está en posibilidad de darte un oportunidad para que le demuestres que tienes las condiciones e intenciones de elevar el nivel de gestión de esa empresa y que por consecuencia se debe traducir en un crecimiento profesional.


Y aquí es que muchas personas me dicen, que ya han hecho esto y aquello y que no hay forma, que es por carita, que los hijos del dueño, que fulanita está pegada y que no hay forma, a lo que yo vuelvo y le pregunto Y tu?, Que vas a hacer?.


Porque es aquí donde un grupo de personas se quedan, dando vuelta en un limbo sin fin, con una sensación de manos atadas, sin querer hacer lo que es doloroso, pero que a la postre es lo que le dará mejor resultado y es cambiar de escenario profesional, ya sea de empresa o de carrera, toca revisar qué es lo que nos va a lograr encarrilar hacia dónde queremos llegar.


Claro está, muchas personas inmediatamente me hablan de que no hay trabajo, pero les digo, no es que tomes la decisión y salga a caminar sin un plan. Aprendí, que así como las empresas hacen sus planes estratégicos, nosotros como personas también podemos hacerlos (y de eso hay mucha literatura), que también nosotros podemos anualmente evaluar si la empresa cumple las condiciones que yo quiero para trabajar, si no la cumple, establece un plan de salida.


Cuando hablo de un plan de salida, es poder vaciar en un mapa estratégico, que quiero, como estoy actualmente y que me falta desarrollar en mi para alcanzarlo; establecerse fechas de compromisos en los temas y establecer una fecha límite en la que estaré en la situación actual, que no quiero estar.


Porque al final de todo, asi como las empresa puede desahuciarte, tu como profesional puedes desahuciar a la empresa, y te cuento que al hacerlo asi, incluso, si lo manejas profesionalmente, te quedan las puertas abiertas para en un futuro, si lo decides y la empresa lo requiere, puedas entrar nuevamente con mejores condiciones.


No existe razón ni justificación, para que vivas una vida que no quieres, al final es tu vida, y debes hacer lo imposible para vivirla a tu manera, no importa las precariedades económicas que tengas, siempre existe la posibilidad de salir hacia adelante, eso sí, con mucho sacrificio y determinación.


Claro está, en el mundo debe haber de todo para que sea mundo y si decidiste, el cual es tu derecho, de que la vida te pase por encima y no te des cuenta, por lo menos ten la suficiente entereza de no quejarte, ya que al fin y al cabo es tu decisión.


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